El pasado domingo día 15 de noviembre se realizó el traslado de la Imagen de la Virgen de Araceli desde su sede canónica la Iglesia del Santo Cristo de la Salud, a la Parroquia de los Santos Mártires Ciriaco y Paula, allí compartirá capilla con la Hermandad de la Virgen de Gracia, Filial de la de Archidona.
A las doce y media se inició la última Eucaristía en el templo, antes de la restauración, la Iglesia se encontraba repleta de fieles, hermanos y devotos de las Cofradías que iniciarían posteriormente sus traslados.
A la finalización de la Eucaristía el hermano mayor, Cristóbal García le impuso al capellán Rvdo. Don Pedro Luís la medalla de la cofradía en señal de agradecimiento por los muchos años que ha estado acompañando a nuestra bendita Madre María Santísima de Araceli.
La Virgen fue colocada en un pequeño trono, el adorno floral consistió en un sencillo centro floral de claveles rosa intenso y gladiolos blancos, tras el canto del himno se procedió al abandono de la Capilla donde ha estado durante 91 años, fue llevada a hombros por cuatro santeros, oriundos de Lucena, con horquillas y timbre cedidos por la Cofradía Matriz.
En el desfile, estuvo presente la hermana mayor de la Virgen de Gracia, capilla anfitriona, Cofradía Filial de la Virgen de Araceli de Sevilla, se contó también con una abundante representación lucentina, hermano mayor de la matriz y parte de su junta, alcalde, concejala, así como numerosos devotos.
La Cruz Parroquial de los Santos Mártires y dos ciriales abrían el desfile, le seguía el Guión de la Filial malagueña, escoltado por dos cirios y numerosos devotos con velas, finalmente, un grupo de música de capilla acompañaba el paso durante su recorrido, tocando marchas de gloria entre los misterios del rezo del santo rosario, la Virgen, preciosa, estrenaba un manto de terciopelo azul verdoso.
A la llegada a la Parroquia de los Santos Mártires, esperaban en la puerta el párroco y director espiritual de la Filial don Federico Cortés Jiménez, así como la junta de gobierno de la Cofradía de los Santos Patronos con varas y Estandarte, también se encontraba en la recepción el hermano mayor de la Cofradía del Huerto.
Tras el canto de la salve, la Virgen de Araceli quedó en su nuevo emplazamiento sobre su peana, recientemente restaurada, repleta de flores y orfebrería con velas.
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